05 Ago 2021

Pascual afronta la nueva normalidad apelando a la innovación y a la transformación digital del negocio

Madrid, 5 de agosto de 2021. Pascual, que acaba de presentar su nueva plataforma on line de reporting en gestión responsable, cerró el pasado ejercicio con una facturación de 618 millones de euros, con una afectación negativa por la crisis del Covid-19 debido al cierre de la hostelería, el cual supuso una caída del 43% en este canal respecto a 2019. Además, la compañía registró un resultado bruto de explotación (EBITDA) de 53,4 millones de euros.

Por otro lado, la compañía continúa con paso firme en el proceso de reducción de la deuda financiera, pasando de 150 a 124 millones de euros en el último ejercicio.

En palabras de su presidente, Tomás Pascual, “el pasado año concentramos nuestros esfuerzos en conseguir que la producción en todos nuestros centros de trabajo se mantuviera con las máximas medidas de protección para nuestras personas y asegurando la satisfacción de la demanda exterior. No obstante, también terminamos de definir nuestro plan estratégico 2020-2023 y apostamos decididamente por una transformación profunda de muchos aspectos de nuestro negocio, además de seguir volcados con la ayuda a la hostelería en los momentos en los que más lo necesita”.

Efectivamente, palancas como la innovación, la omnicanalidad, la transformación digital, la automatización de los procesos o los nuevos modelos relacionales con clientes y consumidores han protagonizado la agenda de la compañía a lo largo de 2020, adaptándose a las nuevas necesidades del mercado y del consumidor. Destaca el nuevo modelo Pascual Innova o la incorporación de miembros de la tercera generación de la familia Pascual a puestos clave, en las áreas de e-business e innovación.

El pasado ejercicio también tuvo lugar un cambio del posicionamiento y de la identidad corporativa. La compañía integró a todas sus marcas en torno al propósito de la empresa ‘Dar lo mejor para el futuro de la alimentación’ y adoptó la denominación “Pascual Dar lo Mejor” como signo identificativo hacia el interior y el exterior.

Nueva web de reporting Pascual

Pascual acaba de presentar su nuevo espacio on line corporativo con información sobre el desempeño sostenible de la compañía a partir de sus tres ejes de compromiso con la sociedad.

Pascual actualizará regularmente las cifras y resultados obtenidos, en un ejercicio de transparencia con todos sus grupos de interés.

De esta manera, la compañía ofrece una plataforma transparente, flexible y dinámica de reporting que muestra la evolución de los hitos e indicadores relativos a sus tres ejes estratégicos en gestión responsable: la salud y la nutrición (Bienestar); el empleo de calidad, la cadena de valor responsable y el impacto positivo en las comunidades (Desarrollo); así como la minimización del impacto medioambiental y la promoción de la economía circular (Medioambiente).

Bienestar: productos y hábitos saludables

Pascual intensificó en 2020 su compromiso nutricional con los consumidores. Fruto de este trabajo, acaba de presentar un Modelo de Perfiles Nutricionales  propio para aspirar a tener los productos con la composición nutricional más equilibrada del mercado. Pascual se ha comprometido a adaptar todas sus categorías a las necesidades nutricionales reales de cada segmento de población al que van dirigidas.

Además, la compañía ha manifestado su decisión de incorporar progresivamente el etiquetado de Nutri-Score en todas sus marcas. Compromiso iniciado en 2020 al ajustar la receta de los batidos Pascual según los criterios de alimentación definidos para los centros educativos, que completa ahora con la obtención de la letra A en Nutri-Score. Por otro lado, Pascual ha firmado un contrato de licencia con Mondelez Internacional para utilizar las marcas Milka y Oreo dentro del negocio de batidos para Iberia (España y Portugal).

En 2020 destaca, igualmente, el lanzamiento de ‘Leche Salud’, la nueva gama de leche de Bienestar Animal enriquecida con vitaminas A, D, B6, B9 y B12 y minerales como el zinc y el selenio, importantes para el cuidado del sistema inmunitario.  Por su parte, Bifrutas ha creado una gama con ingredientes de origen 100% natural, manteniendo al producto libre de conservantes, colorantes y edulcorantes, aumentando sus proporciones de leche y zumo y reduciendo hasta en un 40% los azúcares añadidos.

Por último, el pasado año se presentaron las bebidas vegetales Vivesoy de soja, almendra y frutos secos, todas ellas sin azúcar. Atendiendo a las demandas del consumidor sin renunciar al apoyo al campo español, ya que la materia prima proviene al 100% del cultivo local.

Desarrollo: empleo de calidad y desarrollo social

Desde el inicio de esta crisis el objetivo de Pascual ha sido salvaguardar, en primer lugar, la salud de sus 2.346 empleados y asegurar el suministro continuo de alimentos a la población. Una tarea crítica para mantener la tranquilidad y confianza de la población.

Bajo dicha responsabilidad como proveedor de alimentos, Pascual logró en 2020 el mantenimiento del 100% de sus operaciones, destacando la realización de más de 200 inspecciones técnicas de seguridad frente a la COVID-19 y la elaboración de 15 protocolos-guías de actuación. En este contexto, el equipo de asistencia sanitaria y prevención de la compañía atendió las consultas médicas de 1.005 empleados.

Desde el punto de vista de las personas, Pascual renovó en 2020 con el nivel A de excelencia el certificado EFR otorgado por Fundación Másfamilia, que reconoce la gestión en torno a tres ejes: la Conciliación o Responsabilidad Compartida; la Igualdad de Oportunidades y la Diversidad e Integración de la discapacidad. En este último apartado, Pascual contó el pasado año con 65 personas con discapacidad en su equipo, el 2,75% de la plantilla de la corporación y, además, impulsa la contratación indirecta gracias a la compra de bienes y servicios a Centros Especiales de Empleo con el fin de reforzar su empleabilidad.

Por otro lado. la compañía firmó con la Fundación Másfamilia el Charter del Teletrabajo para fomentar un claro compromiso con la cultura de la flexibilidad laboral y el teletrabajo, un logro ampliamente alcanzado a lo largo del año con una adaptación ejemplar de las áreas y los procesos en un tiempo récord a la modalidad de trabajo en remoto.

En cuanto a la formación, el 84% de la plantilla de Pascual participó en, al menos, una acción formativa en 2020, con un total 12.419 horas (5,3h/persona) y un 8 sobre 10 de índice de satisfacción en los itinerarios estratégicos.

El mantenimiento de una cadena de valor responsable ha seguido siendo una constante de Pascual a pesar de las limitaciones derivadas de la pandemia. Prosigue la apuesta de Pascual por el aprovisionamiento de soja 100% de origen local, trabajando con agricultores familiares de origen España, con contratos estables y de larga duración, así como la renovación de la certificación AENOR en Bienestar Animal Welfair.

En el canal de hostelería, Pascual lanzó en mayo de 2020 un plan 360º para activar y reinventar el negocio de más de 80.000 pequeños hosteleros afectados por la crisis sanitaria. Acompañándolos en la reapertura con medidas para reactivar su actividad; incentivar las ventas a corto plazo con nuevas formas de negocio, como delivery o take away, y digitalizarse para afrontar la “nueva normalidad”. La compañía, además, puso a su disposición gratuitamente alrededor de 6,5 millones de consumiciones de productos, tanto de sus marcas como de sus partners.

Cabe asimismo señalar el compromiso de Pascual con el desarrollo del ecosistema de emprendimiento e innovación a través de la participación en la plataforma colaborativa y sin ánimo de lucro, Madrid Innovation Driven Ecosystem (MIDE) y del programa burgalés de aceleración de proyectos, Polo Positivo.

Pascual continuó en 2020 su actividad social con las entidades sociales del Tercer Sector declaradas de utilidad pública, Fundación ONCE; Cruz Roja; Fesbal, Fundación A la Par y Cáritas. Con esta última, Pascual se unió en abril de 2020 para llevar más de un millón de desayunos a los colectivos más desfavorecidos por la crisis del Covid-19.

Por último, la Fundación Tomás Pascual y Pilar Gómez-Cuétara continuó en 2020 su labor filantrópica con la construcción de la mano de AUARA, Cáritas y World Vision de pozos de agua en países en desarrollo. En concreto, ha financiado, junto a AUARA, la construcción de tanques de agua y pozos en Kenia, Camerún, Marruecos y Malauis con 6.200 beneficiarios.

Medioambiente: operaciones sostenibles y economía circular

Uno de los grandes hitos del pasado año ha sido la conclusión del ciclo estratégico ambiental 2015-2020 en el que Pascual se había marcado unos ambiciosos objetivos en cada uno de sus ejes.

En la columna de operaciones sostenibles, Pascual disminuyó en el ciclo 15-20 un 22,9% el consumo eléctrico y un 24,2% el de agua. Por su parte, la generación de residuos urbanos industriales cayó en más de un 74%. Además, la compañía ha recibido este año el certificado Residuo 0 de Aenor en todos sus centros. El alcance del proyecto engloba a toda la compañía y actividades, concretamente 32 centros que de forma conjunta han conseguido un 93.3% de valorización. En total, más de 11.100 toneladas valorizadas frente a las casi 12.000 toneladas de residuos generados.

La lucha contra el cambio climático sigue siendo una prioridad para Pascual que consiguió una reducción de la ratio de emisiones de un 25,42% en el periodo 2015-2020 gracias a sus esfuerzos tanto en las plantas, como en el transporte, la logística, el aprovisionamiento y los materiales de envase y embalaje. La Asociación de Empresas de Fabricantes y Distribuidores, AECOC, otorgó en 2020 a Pascual su primera estrella Lean&Green.

También ha seguido adelante la estrategia de la compañía de envases sostenibles como garantía de la defensa de la circularidad de la economía, reseñando el compromiso de la marca de agua mineral Bezoya para que todas sus botellas se fabriquen, este 2021, con plástico 100% reciclado (rPet).